martes, 21 de junio de 2011

El impuesto es robo a mano armada



La violencia es una de las características esenciales del Estado. No importa de cual estemos hablando. Ya sea un Estado totalitario, el estado de una sociedad libre, un estado monárquico o keynesiano, mal llamado de bienestar.(ya ahondare el tema en otra entrada)

No pagar impuestos en las monarquías europeas era símbolo de privilegio. Los que pagaban impuestos eran los súbditos, los campesinos, los burgueses. El resto era una clase privilegiada y no productiva.
Si nos situáramos en la edad media nadie dudaría de que el impuesto fuera un robo, algo injusto. Los campesinos estaban obligados a ceder la mayor parte de sus cosechas mientras les dejaban lo justo, y si recibían algo más dependía de la bondad del señor feudal al cual estuvieran atados. Porque hablar de que había un contrato en el cual el señor feudal ofreciera protección dentro de su castillo a cambio de que el campesino trabajara es, por lo menos, incompleto. A los campesinos no les quedaba otra opción que aceptar el trato, porque sino no tenían a donde ir. Sus tierras estaban en ese lugar desde generaciones y no tenían conocimientos suficientes como para volver a ser cazadores recolectores (el conocimiento que requiere serlo es sorprendente).
El impuesto en los Estados monárquicos era entonces algo impuesto. El peso de la autoridad real recaía sobre el que no los pagará, y sobre que cosas se cobraba impuesto, cuánto, etc., lo decía el rey, el autócrata, el gobernante. Y cambio de este pago de impuestos no recibían algo muy substancioso a cambio, recibían protección contra la guerra. Protección que se perdía, por otra parte, cuando los enrolaban por la fuerza para combatir.
El impuesto era el medio por el cual la clase privilegiada, que detentaba el poder, explotaba al resto de los habitantes del reino, que eran los súbditos.

¿Qué ha cambiado desde entonces?

-Si no se pagan impuestos, uno va preso. Es por lo tanto obligatorio, es un delito no pagar impuestos.

-Recaen con más fuerza sobre los desprotegidos. La gente con más recursos se puede hacer amiga del poder para que le subsidios, o para evadir impuestos (como con los títulos de nobleza comprados). O se las puede arreglar y hacerlo de forma ilegal. Además, pasado cierto umbral de riqueza el sistema impositivo comienza a cobrarte en promedio, solo un 30%(creo que a los 45.000 mensuales). Mientras a los pobres y clases medias les estaría robando un 45% y un 65%. Depende el cálculo y los bienes consumidos.

-Los súbditos (acá los gobernantes acostumbran llamarle pueblo) reciben algo que, CUANDO MENOS es dudoso si los beneficia. Escuelas públicas que se caen a pedazos (ni hablar de que el programa de estudios lo dicte el estado), sistema de salud pública ineficiente y defectuoso. Muchas veces hay que esperar largos turnos para ser atendido, con profesionales que no tienen más incentivo que el amor a la profesión (la mayoría se convierten en espíritu en empleados públicos). Lo mismo con los maestros. Planes sociales, trabajar, asignación universal, etc. que desincentivan el trabajo y no alcanzan a devolver ni por asomo toda la plata que el gobierno les robo. Subsidios a empresas ineficientes (si van a subsidiar empresas bajo la excusa de “industria naciente” por qué no lo hacen con plata de sus bolsillos). Nos obligan a pagar precios más caros por diversos producto (muchos hasta donde entiendo, debería investigarlo más a fondo). Netbooks fácilmente hackeables que además desincentivan el estudio. Y un laaaaaaargo etc.

-Los impuestos son arbitrarios. Los nobles donde veían una actividad productiva enseguida le ponían un impuesto, porque necesitaban robar más plata para sustentar su aparato represor y sus fiestas. Yo, y muchos otros liberales creen que el rol del estado, para algunos el único, para otros el más importante, es asegurarse de que los derechos individuales de las personas no sean cercenados. Para eso se necesitan policías, tribunales, etc. Además, el Estado tiene que sustentarse de alguna forma. Lo que tendría que suceder es, entonces, que una boleta te llegue exactamente el monto que te están cobrando y para qué es. Los estadounidenses saben cuanto de su dinero (de forma directa al menos) va a parar a la guerra. Les llega en una boleta. Eso no es un impuesto arbitrario (tiene un fin específico, más allá de que se pueda criticar ese uso específico). Otra cosa es el IVA por ejemplo. Maravilloso es que en Nini, en la góndola de precios, haya dos precios. Con IVA y sin IVA. Así, uno se puede dar cuenta de que el producto se encarece 1$ gracias al IVA. En la mayoría de los productos la diferencia entre ambos precios suele ser de 1$. Pagar 1$ de más por cada producto. O sea que si compras cien bienes (que se yo, 100 paquetes de fideos) el estado ahí te robo 100$. ¿Cuánto es 100$ para una familia pobre? La diferencia entre comer o no comer capas. Pero el impuesto no se acaba ahí, es un ejemplo. Después esta el impuesto a las ganancias. Significa que si posees determinados bienes tenés que pagar impuestos. Si estas alquilando un local tenes que pagar, además de las cuentas, un impuesto porque posees ese local. Lo mismo si tenés una lancha por ejemplo. Y así con incontables bienes. Es decir, a la gente que tiene la capacidad de generar dinero, de generar riqueza, y con esa riqueza quizás dar trabajo a otras personas, el Estado la castiga, le quita dinero porque tiene riqueza. No es que el estado sea nuestro padre, pero supongamos que un padre tiene un hijo. Si el padre cuando ve que su hijo gana mucho dinero le sacara una parte de este para dárselo, que se yo, al vecino porque no encuentra trabajo, pasan dos cosas: dependiendo del monto asignado se desincentiva más o menos el buscar trabajo por parte del vecino, ya que tiene menos necesidad de conseguir empleo, además, desincentiva al hijo a que produzca riqueza. Se va a esforzar menos, ya que sabe que su padre si ve que tiene mucho dinero se lo va a sacar. Pero lo más importante: es robo. La plata el hijo se la gano limpiamente, sin estafar a nadie. Si el vecino fuera y le sacará esa plata por la fuerza sería robo, estaría mal. Cuando el padre lo hace misteriosamente se vuelve correcto. Cuando el estado hace ciertas cosas parece que misteriosamente se vuelve correcto.

-La nobleza ya no existe por suerte. No existen los sectores improductivos como tales. Quienes afirman que los empresarios son improductivos no tienen idea de lo que ser empresario implica. Y no es que yo sea empresario y lo entienda, no lo soy. Tampoco tengo un pariente que lo sea. Es más, seria evidencia anecdótica y no contraría como una prueba. Es un ejercicio de sentido común nomás. Si yo quiero poner una pizzería por ejemplo, cualquier otro negocio sirve. Si yo quiere tener una pizzería, no tengo fondos, pero mi tío, que esta lleno de guita, me alquila el local y me compra el horno y los ingredientes, no importa que se pueda rascar las bolas todo el día porque el padre le heredo un montón de guita. Tiene plata que su padre gano de forma honesta y que con todo derecho le heredo. Y esa plata que el esta aportando me esta permitiendo trabajar. Eso esta muy lejos de ser una clase parasitaria. No importa que se haya contratado una junta de ejecutivos que le manejen la empresa, por más que la persona no se mueva el capital que esta posee no es ocioso y fue ganado limpiamente, y eso es lo único que importa.
Más allá de eso, la mayoría de los empresarios no la tiene tan fácil. Sufren de los trastornos que generalmente produce tener grandes responsabilidades y preocupaciones: estrés, úlceras, problemas para dormir, entre otros que seguramente desconozca. Bill Gates no se levantaba a los ocho de la mañana para ir a trabajar a rascarse en el sillón de su empresa. Por algo anuncio su retiro. Ser empresario no es fácil.

Pero pareciera que los gobernantes, sobre todos por estos lares, se las dan de nobles. Cobran impuestos arbitrarios, viven en mansiones con sirvientes las 24hs (que contraten un catering no necesitan que los cocineros vivan con ellos), van al laburo en helicóptero, viajan en limusinas escoltados por policías que te patean el auto para que te corras (como relata Benegas Lynch). Pueden elegir a voluntad cuanto cobrar, gastan  el dinero público en propaganda política, gastan el dinero público en espectáculos ostentosos y sin sentido (ascensor transparente en la rosa, espectáculo de snowboard en corrientes).
Y no es que la ostentación este mal. Si un empresario tiene plata y se la quiere gastar en rolex y ropa de 500$ no hay nada de malo, pero que un político lo haga, cuando su sueldo ha sido sacado coactivamente (me gustaría ver cuanto ganaría la presidente si cada persona voluntariamente aportara la plata que cree necesaria) si esta mal. No será legalmente punible (no tendría por que serlo por otro lado), pero da cuenta de que como gobernantes no están situados donde les corresponde. En las verdaderas democracias los gobernantes están para servir a los gobernados, no al revés. No me da la sensación de que nuestros gobernantes quieran servirnos cuando dictan conciliaciones obligatorias. Parece que estamos para servirles.

Que quede claro, cuando pagamos impuestos le estamos pagando el suelo a estos señores que se dan siestitas en la cámara y dictan leyes que coartan libertades. Le estamos pagando el suelo a la policía corrupta que participa en redes de trata. Son NUESTROS EMPLEADOS, los políticos, los funcionarios públicos, etc. SON NUESTROS EMPLEADOS. Y no actuamos como tales. Actuamos como súbditos, incluso a veces rebaño. (uso un plural participativo que no necesariamente me incluye, cada cual sabrá cuando actúa de esas formas). Si el Estado no puede resguardar nuestros derechos de forma eficiente, como va a, eventualmente, encargarse del bienestar general de la población. El argumento de las personas que sostienen eso no tiene ni pies ni cabeza.

La naturaleza del impuesto nunca va a cambiar. Es violenta y coactiva de por sí. Por eso algunos piensan que el Estado debería sostenerse con donaciones. Pero dejando eso de lado, el impuesto, por su sencilla naturaleza, esta mal, es incorrecto. Por eso debe cobrarse una cantidad mínima de impuestos, debe reducirse todo lo que se pueda. El impuesto, cuando se cobra lo mínimo, es un mal menor, es necesario para que funcione el Estado, el cual se encarga de resguardar los derechos naturales de cada persona: vida, libertad y propiedad. Pero cuando el impuesto es excesivo es un robo. Peor aún, es robo ejercido por el organismo que se supone debería protegernos. Cuando una persona asesina a otra, o la hace desaparecer esta está lesionando un derecho. Pero cuando el que lo hace es el Estado está violando un derecho. Y se usa la palabra “violar” porque el Estado se supone debería proteger ese derecho. El impuesto excesivo es una violación al derecho de propiedad. Y hay buenos argumentos para creer que uno de los grandes motivos por el cual muchas sociedades están sumidas en la pobreza.

Gracias por tomarte tu tiempo en leer mi blog.

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